Apocalypse Now (Francis Ford Coppola, 1979)

El propio Coppola explicó de manera inmejorable la obra que había hecho, en su presentación en el Festival de Cannes del año 79 (que, por supuesto, ganó de calle): “No es una película sobre Vietnam. Es Vietnam”.

Para mi, es más aún. Es un tótem. Todo en Apocalypse Now es mítico. Es mítico el guión, escrito por John Millius y reescrito hasta la demencia por Coppola. Es mítico su rodaje y su making of (esencial, Corazones de tinieblas se titula); es mítica su banda sonora; la fotografía de Storaro; las interpretaciones de Martin Sheen, Robert Duvall, Dennis Hopper… Es mítico Brando, por supuesto. “El horror… El horror”. Escalofríos y pelos de punta solo de pensar en ello.

Y, claro, es mítico Coppola, que tras hacer tres obras maestras consecutivas del calibre de El Padrino, La conversación y El Padrino II, remata su póker de ases con esta película, que es de esas que explican por si solas por qué el cine es un arte.