Enrique V (Kenneth Branagh, 1989)

Cuando parecía que el séptimo arte ya había dicho todo lo que tenía que decir del universo Shakespeare, Kennet Branagh apareció de la nada para colocar esta maravillosa película en la liga de las mejores adaptaciones al cine del genial dramaturgo inglés.

Ahora que le ha dado por hacer Thor y cosas por el estilo, conviene recordar que Branagh es uno de los más grandes cineastas ingleses de las últimas décadas, con películas del calibre de Los amigos de Peter o Mucho ruido y pocas nueces.

En Enrique V dicta una lección de teatro, pero también de cine. El emocionante discurso del rey nunca sonó tan veraz. La secuencia de la batalla final es un ejemplo modélico de cómo hacer grandes cosas con pocos medios, culminada con un plano secuencia sobrecogedor que te impulsa a levantarte y aplaudir hasta que te sangren las manos. Qué gran película.